Importación de autos cerrada, importación de insumos de autos nacionales a cuentagotas, huelgas en fábricas de componentes, necesidad de exportar los autos de fabricación local para conseguir dólares, falta de repuestos importados y para rematar, una estructura siniestra de impuestos internos. El combo perfecto para destruir la industria. Tantas burradas juntas es difícil de conseguir.
Tal cual, y esto ya pasó, yo estuve en varias reuniones con el famosísimo Morenito que te bardeaba y amenazaba a más no poder por no lograr en un año lo mismo que a la industria Brasileña le había llevado más de 30. Nos pedían exportación y nos dejaban por casi dos años sin algunas piezas básicas para terminar los vehículos, piezas que nadie fabricaba en Argentina. Por suerte ya estoy jubilado y sin tener que soportar esa lacra.
Importación de autos cerrada, importación de insumos de autos nacionales a cuentagotas, huelgas en fábricas de componentes, necesidad de exportar los autos de fabricación local para conseguir dólares, falta de repuestos importados y para rematar, una estructura siniestra de impuestos internos. El combo perfecto para destruir la industria. Tantas burradas juntas es difícil de conseguir.
Tal cual, y esto ya pasó, yo estuve en varias reuniones con el famosísimo Morenito que te bardeaba y amenazaba a más no poder por no lograr en un año lo mismo que a la industria Brasileña le había llevado más de 30. Nos pedían exportación y nos dejaban por casi dos años sin algunas piezas básicas para terminar los vehículos, piezas que nadie fabricaba en Argentina. Por suerte ya estoy jubilado y sin tener que soportar esa lacra.